5/25/2013

TAN PIADOSOS, TAN DEVOTOS. PRÁCTICAMENTE INÚTILES. Santos y Malditos.



Los primeros personajes que abren el evangelio de Lucas son dos pertenecientes a lo más selecto de las familias sacerdotales de Israel: un sacerdote y su mujer, también ella de estirpe sacerdotal por ser descendiente de Aarón, hermano de Moisés y primo del sumo sacerdote de Israel. 

Lucas los presenta de forma solemne: -Hubo en tiempos de Herodes, rey del país judío, cierto sacerdote de nombre Zacarías, de la sección de Abías; tenía por mujer a una descendiente de Aarón, que se llamaba Isabel .. (Lc 1,5). 

Los nombres que el evangelista escoge para sus personajes están cargados de significado y de historia: Zacarías (del hebreo Zelearyábü) significa -Yaboé se acuerda», y en la Biblia es nombre de reyes, sacerdotes, profetas y mártires; mientras que Isabel (del hebreo Elisbába'), «Dios es plenitud" es el nombre de la única Isabel del Antiguo Testamento, la mujer de Aarón. 

Zacarías es sacerdote. Con una población de cerca de seiscientos mil habitantes, los sacerdotes en Palestina eran aproximadamente dieciocho mil: un sacerdote por cada treinta personas. 

Este elevado número se debe al hecho de que no se llegaba a sacerdote por vocación, sino por nacimiento: el sacerdocio era hereditario y se transmitía de padres a hijos. 

La pertenencia de Zacarías al clero no le daba demasiado quehacer. Como todos los sacerdotes residía en su aldea, donde desempeñaba un trabajo, ejerciendo en el templo de Jerusalén dos semanas al año y durante las tres fiestas anuales de peregrinación (Pascua, Pentecostés y Tabernáculos). 

Para permitir a todos los sacerdotes oficiar en el Santuario, éstos se subdividían en veinticuatro categorías. Zacarías pertenecía a la comprendida entre las diez más importantes. 

El evangelista subraya el comportamiento religioso de Zacarías e Isabel, cuando dice que -ambos eran justos delante de Dios, pues procedían sin falta según todos los mandamientos y preceptos del Señor .. (Lc 1,6). 

Zacarías e Isabel son modelos de santidad: no sólo pertenecen a la aristocracia sacerdotal, sino que en la práctica cotidiana de la religión son insuperables, pues no se limitan a cumplir todo lo que la Ley manda a los hebreos, sino que observan incluso los seiscientos trece preceptos que los rabinos habían encontrado en la legislación de Moisés. Por esto se definen como -justos .. , esto es, fieles a la voluntad de Dios. 

Imposible no admirar a una familia de esta clase, que, sin lugar a dudas, será bendecida por Dios. 

¿Bendecida? 

No. Maldita. 

Después de haber presentado lo mejor de la religiosidad judía, mientras el lector comienza a admirar a esta pareja, Lucas afirma que no sólo no es bendecida, sino que, según la mentalidad de la época, es castigada: de hecho -No tenían hijos, porque Isabel era estéril, y eran ya los dos de edad avanzada .. (Lc 1,7). 

La religión enseñaba que Dios premiaba a los justos, concediéndoles una larga vida, mujer fértil y abundancia de hijos. Al contrario, los malvados eran castigados con una vida breve, miseria y mujer estéril.
La esterilidad no era considerada, por cierto, un hecho fisiológico, sino religioso que caía de lleno entre las maldiciones de Dios: -La estirpe de los impíos es estéril. (Job 15,34). 

El evangelista denuncia que Isabel y Zacarías, no obstante su fidelidad a las prescripciones más pequeñas, son incapaces de practicar el primer gran mandato que Dios había dado a los hombres: « Creced y multiplicaos» (Gn 2,28).

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